Poema escrito en un viaje a La Habana, Cuba: 2022.
La herida abierta yace perenne
Ensangrentada diluvia el dolor de la carencia
¿Qué tanto buscas?
Otras manos que te acaricien, otra mente que te piense y le de sentido a tu existencia
¿A dónde vas?
A buscar llenar tu ausencia en otros lares
Quizás, volver a tu isla petrificada en el tiempo te de las respuestas que tanto buscas, que tanto anhelas
Como ese vino amargo que te encanta, que llena la copa y la rebalsa, esa que te gusta beber los sábados, esa que está vacía y llena a la vez.
¿Qué te duele?
¿Qué no te quieran?, o que los versos que se entretejen sean tan deformes, tan aburridos
Y tan carentes de esa locura que a ti te encanta y que te enerva.
¡Quítate todo!
Tus vestimentas que te engalanan, diseñadas para esconder tu verdadera belleza
Desnuda el alma, muerde tu boca y suelta tu pelo, tus exigencias.
¡Mírate entera!
No temas verte en pura esencia, no busques afuera lo que en ti vuela
Tus pies descalzos sobre la arena.
¿Qué te duele? ¿Qué no te quieran?