Najash
Hoy quiero corromper la vida,
ahogarme con la verdad
y que me queme como el sol penetrante en los párpados,
porque no hay otra manera de mentirme mejor
que como el atronador aullido de la quietud.
Saborea mi paladar
las palabras:
para escupir el camino que me guía al entierro,
en donde arrojaré lo que me paraliza para encontrar a mi nuevo Dios.
La virtud y mi boca tendrán el mismo espacio.
Renunciaré así a lo que me mantenía furtiva,
tendrá que ser así,
no hay otra manera de quebrantar el cuerpo.