Rosario Castellanos

24 de sep de 20211 min.

Ajedrez

Porque éramos amigos y a ratos, nos
 
amábamos;
 
quizá para añadir otro interés
 
a los muchos que ya nos obligaban
 
decidimos jugar juegos de inteligencia.

Pusimos un tablero enfrente
 
equitativo en piezas, en valores,
 
en posibilidad de movimientos.
 
Aprendimos las reglas, les juramos respeto
 
y empezó la partida.

Henos aquí hace un siglo, sentados,
 
meditando encarnizadamente
 
como dar el zarpazo último que aniquile
 
de modo inapelable y, para siempre, al otro.

Rosario Castellanos, México

    40
    1